lunes, 15 de octubre de 2012

Nonagésima Tercera Estación: "10 kilómetros" Parte I


El Viernes recorrí 10 km en 1 hora y 9 minutos, el domingo los mismos en  1 hora. Cualquiera diría que en un día bajé en nueve minutos mi registro. 
Pero no, resulta curioso y paradójico: 10 km en bicicleta 1 hora y 9 minutos, 10 km corriendo 1 hora. 
¡Jopé! voy más lento en bici que a pié.
Claro la diferencia está en que el viernes era la subida al Mogote, en la Sierra de Líjar, 700 metros de subida acumulada en 10 km. con lo que la apreciación ya es diferente, ¿verdad?
Pero no deja de ser curioso, 10 + 10 en este festivo fin de semana pasado.
A veces las matemáticas...
Bueno de lo que yo quería es hablar en este post es de la magnífica experiencia del día del Pilar en la que con la familia participamos en la última prueba clasificatoria de la liga del club BTT LOS OMIOS y que ha sido satisfactoria a no poder más. 
Treinta y cinco Bikers para competir, todo un record que será recordado y añorado, deseando que llegue el próximo año para volver a repetir tan maravillosa jornada.
Me llevé toda la semana preparando: un pequeño entreno el martes, limpieza de la bici por Tuitubici (no me daba tiempo a mi hacerlo) el miércoles, compra de la comida, de la bebida por fin el jueves, por la noche participando junto a los hermanos Pistolo, en casa de Carlos Salguero, con el Niño Metales, Antonio "Notaría" y Rigui, en la preparación del guiso de carrillada que degustaríamos tras la prueba deportiva.
Aunque preparar preparar, lo que se dice preparar... ni echar sal.
La expectación durante la semana, la previsión de una altísima participación y la guasa y el cachondeo, fueron los temas a tratar en tan improvisada tertulia, y así entre cervecita, y algún picoteo terminó la cosa con  algo de "elixir" que yo me perdí porque huí convenientemente.
Al día siguiente temprano y tras el desayuno en  el Patio de César, con su hijo, nuestro compañero, su pareja y Antonio "Niño Metales" nos dispusimos a marchar dirección La Muela (Algodonales, Cádiz). La compañía del Niño hizo ameno el camino y he de indicar que me dió, tanto en la ida como en la vuelta, una clase magistral de ciclismo, esfuerzo y mantenimiento. También hablamos de otras cosas, de la vida y de lo cotidiano.
Además he de decir que tuve el honor de llevarme y traerme al campeón de la prueba.
El angosto camino desde Coripe hasta La Muela hizo que llegásemos tarde al Mogote y que lo hiciésemos casi todos a la vez. Una vez coronado el magnífico merendero nos vestimos de ciclistas, montamos en las bicis, algo de calentamiento y para arriba.
Bueno, mañana sigo....

Continuará...

1 comentario:

Unknown dijo...

Enhorabuena,por la facilidad de contar tus bivencias .date prisa estoy ancioso de leer la próxima!!!!el niño metale .