El sábado fallecía en su casa, muy bien atendido por sus hijas, un personaje visueño por excelencia: Manuel Bonilla "el Inglés el municipal" a los 92 años.
Todo un personaje en nuestra localidad y a la postre mi abuelo político.
Todo el mundo conocía al "Inglés", Guardia Municipal primero y en su prejubilación bedel del Instituto (la antigua academia). Muchos jóvenes, ahora cuarentones, lo recordarán. También aquellos a los que "perseguía" cuando se saltaban la reja de la academía y jugaban al fútbol en sus instalaciones. Más de un balón rajó o se quedó de los traviesos que tenían dicho lugar como sitio de esparcimiento a pesar de que estaba prohibido.
La imagen que tengo de él es de una persona bonachona, aficionado a los deportes televisados, a su purito y al tabaco negro. También era una persona firme y seria cuando se enfadaba, aún así que yo sepa no tenía muchos enemigos, si es que los tenía.
La vida no lo trató nada bien, tuvo que ir a la guerra, dejando a su mujer embarazada, luego ha conocido la muerte prematura de tres de sus hijos y de dos de sus nietos, demasiadas desgracias.
Hasta no conocer el libro de la memoria histórica de la guerra civil en nuestra localidad no he sabido que fue uno de los que encabezaron la dominación "roja" en los primeros días del golpe de estado franquista. Fue uno de los muchos que el Jefe de Falange y posterior alcalde franquista, León Ríos, salvó de haber sido fusilado. Ahora que lo pienso, a cuánta gente salvó este hombre y cuántas generaciones deben su pervivencia gracias a su firme convicción de que en El Viso no se fusilaría a nadie.
Manolo "el Inglés" deja tras de sí Siete hijos, Veintiún nietos, Veintidós bisnietos y un tataranieto. Toda una generación, una saga de "ingleses e inglesas" que lloraron su muerte, aunque con el sentimiento de orgullo por haberlo tenido como esposo, padre y abuelo.
Mercedes, su esposa siempre ha velado por él, toda una vida dedicada a su marido, hijos y nietos. Tiene el cielo ganado por ser una mujer buena, que viene cuidando de los suyos y a la que la vida ha sido muy injusta e ingrata con ella.
Manolo a mi me quería mucho, lo digo con la boca llena, le considero mi verdadero suegro y sin duda le echaré de menos.
Ha muerto una leyenda de El Viso, que el Señor le tenga en su gloria y que su Virgen de los Dolores de la que fue su costalero sea su mediadora poderosa.
Descansa en Paz Manolo.
Todo un personaje en nuestra localidad y a la postre mi abuelo político.
Todo el mundo conocía al "Inglés", Guardia Municipal primero y en su prejubilación bedel del Instituto (la antigua academia). Muchos jóvenes, ahora cuarentones, lo recordarán. También aquellos a los que "perseguía" cuando se saltaban la reja de la academía y jugaban al fútbol en sus instalaciones. Más de un balón rajó o se quedó de los traviesos que tenían dicho lugar como sitio de esparcimiento a pesar de que estaba prohibido.
La imagen que tengo de él es de una persona bonachona, aficionado a los deportes televisados, a su purito y al tabaco negro. También era una persona firme y seria cuando se enfadaba, aún así que yo sepa no tenía muchos enemigos, si es que los tenía.
La vida no lo trató nada bien, tuvo que ir a la guerra, dejando a su mujer embarazada, luego ha conocido la muerte prematura de tres de sus hijos y de dos de sus nietos, demasiadas desgracias.
Hasta no conocer el libro de la memoria histórica de la guerra civil en nuestra localidad no he sabido que fue uno de los que encabezaron la dominación "roja" en los primeros días del golpe de estado franquista. Fue uno de los muchos que el Jefe de Falange y posterior alcalde franquista, León Ríos, salvó de haber sido fusilado. Ahora que lo pienso, a cuánta gente salvó este hombre y cuántas generaciones deben su pervivencia gracias a su firme convicción de que en El Viso no se fusilaría a nadie.
Manolo "el Inglés" deja tras de sí Siete hijos, Veintiún nietos, Veintidós bisnietos y un tataranieto. Toda una generación, una saga de "ingleses e inglesas" que lloraron su muerte, aunque con el sentimiento de orgullo por haberlo tenido como esposo, padre y abuelo.
Mercedes, su esposa siempre ha velado por él, toda una vida dedicada a su marido, hijos y nietos. Tiene el cielo ganado por ser una mujer buena, que viene cuidando de los suyos y a la que la vida ha sido muy injusta e ingrata con ella.
Manolo a mi me quería mucho, lo digo con la boca llena, le considero mi verdadero suegro y sin duda le echaré de menos.
Ha muerto una leyenda de El Viso, que el Señor le tenga en su gloria y que su Virgen de los Dolores de la que fue su costalero sea su mediadora poderosa.
Descansa en Paz Manolo.
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